El fin

Autoretrato (Tinta+Akuarela+Photoshop)

No sabía ke hacer, llevaba horas dando vueltas por casa y no conseguía tranquilizarse. Había preparado té, había limpiado el polvo, barrido, fregado, había visto la televisión, había salido al balcón para observar el atardecer, había cenado, lavado la vajilla, puesto una lavadora, la había tendido, había leido, visto una película y cerca de las 3 de la madrugada el sueño la había vencido...


Al despertar, se enkontró tumbada sobre la kama, las sabanas echadas a un lado, su pelo largo kaia sobre la almohada, su viejo reloj despertador markaba cerka de las 10 de la mañana. Estiró el brazo, esperando enkontrarle al otro lado de la kama, pero allí las sabanas seguían impolutas y frías, muy frías...

Se levantó y se acerkó a la silla del eskritorio, allí él le dejaba todas las mañanas la ropa bien doblada y kolokada para el día siguiente. Hacía días ke no le veía pero al fin y al cavo, era normal, su trabajo le hacia estar fuera de kasa kasi las 24 horas, extraño era el día en ke ella se despertaba y eskuchaba la puerta cerrarse, corría al deskansillo, pero el ascensor ya bajaba, o se eskuchaban los pasos en la eskalera, muy abajo ya, komo para decir algo.

Decidió salir de kompras, el barrio era un barrio tranquilo y saludó a numerosas vecinas en el kamino de ida y de vuelta, iba kontenta y se jactó ante varias de haber comprado un rico salmón para prepararle una cena especial a su keridisimo marido.
Había recibido sonrisas y komentarios al oido entre las vecinas, pero ella lo atribuyó a la envidia. Lo cierto es ke no vivian mal, tenian suficiente dinero ahorrado en estos 25 años de matrimonio para vivir y permitirse estos pekeños kaprichos, eso la gente, en una pareja en los ke ambos no llegaban a la mitad de siglo, no lo entendía.

Realizó las tareas del hogar, su marido siempre la había animado a trabajar fuera de casa, siempre decía ke ya contratarian a alguien para realizar esos trabajos, pero ella siempre le había kontestado ke se enkontraba agusto haciendose kargo de las kosas de su kasa, más ke metiendo a kualkier deskonocido o deskonocida para hacer un trabajo simple y ke no le llevaba más de 2 o 3 horas al día, no habían tenido hijos ya ke su vientre era komo un campo rociado de sal, pero eso no les había amargado en absoluto, se enkontraban en tramites de adopción y ya faltaba poko para tener a su pekeño.

Llegó la noche, la cena estaba lista en la mesa, una mesa dekorada elegantemente y sin duda, kon un ambiente romantiko. Pasaron las horas y ella se mantuvo despierta, pensó en no dormir si era necesario sólo por cenar junto a él, hacía tanto ke no lo hacían, tal vez esta noche llegase un poco antes. Esperó sentada, pero el no llegó, otra noche en la ke dormía fuera.

La idea de la infidelidad le kruzó la mente komo un rayo, komenzó a pensar las noches que pasaba fuera... hacía cuanto que no dormian juntos?, hacía cuanto que ni pasaba 5 min con ella en el salón?, se levanto como un resorte y corrió al telefono. Llamó a la oficina, al numero privado del despacho, y cual fue su sorpresa, cuando una mujer cogió el auricular, ella preguntó por su marido pero obtuvo un seco "no se encuentra...".

Colgó el telefono echa una furia, realmente lo había exo, le había sido infiel. Sólo pensó un par de kosas más, antes de salir al balcón y lanzarse al vacío...

Al otro lado del telefono, la sekretaria, se kedó kon ganas de komunikar a la persona ke había llamado, ke el director de ventas...

Había muerto, hacía ya varios meses.


(La realidad se enkuentra sólo en tu mente)


*****


MODO: Día libre
PHOTO: SpeedDraw.jpeg by Me


6 comentarios:

Anónimo dijo...

vaya, me he dejado los ojos aquí. Mira que tuve suerte en esta vez seguir el enlace, cosa que nunca hago, pero me ha gustado :D Quizá demasiado triste, el final llega muy pronto.. asi que ya sabes, cuando te pongas a escribir largo y tendido, tell me!
bueno, saluditos!
luci

AGRA dijo...

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Qué fuerte!!!!!!!!!!!!!! Me gusta leer tus historias, nunca me espero los finales, me sorprendes...
Por cierto, la frase "su vientre era komo un campo rociado de sal" me ha llamado bastante la atención, me pregunto en qué estarías pensando...ya me contaras!
¡¡Me ha gustado mucho la historia!!
Besitos ;)

_MeiA_ dijo...

no se si te lo he dicho... pero escribes de p.madre! joder!

el autorretrato genial.

un beso

DuLcE tEnTaCiÓn dijo...

Que buena la historia, el final me ha resultado un poco triste y no me lo esperaba, pero está super bien escrita, que envidia me dais los que sabeis escribir.
Además de el dibujo, que es genial :D
Un besito

Meri dijo...

Una forma muy creativa de explicar este hecho del que todos en alguna medida hemos hecho uso.

Engañar a nuestra mente en ocasiones nos ayuda a superar obstaculos y a omitir realidades dolorosas. En este caso, el desenlace ha sido trágico..me ha gustado mucho.

Besitos!

Sascha! dijo...

Escalofríos!!! brrr...

no me lo esperaba la verdad, escribes super bien...

y el autorretrato me encantó!

saluditos y un beso desde la fría ensenada.